QUERIDO PRESIDENTE

Querido Presidente del Gobierno, Señor Mariano Rajoy:

Me dirijo a usted en primer lugar para felicitarle por haber sido investido hoy sexto presidente de nuestra "maltrecha" democracia. Lo ha conseguido usted a la tercera. Y es que ha demostrado usted ser un corredor de fondo que ha superado todos los escollos que ha encontrado en el camino sin afeitarse su canosa barba y sin decir ni pío. Es usted un hacha.

Soy una ciudadana que no le he votado, pero tengo el derecho y la obligación de decirle:

1. Ha conseguido usted un holgada mayoría absoluta, por favor, no gobierne por decreto. Hable, dialogue, llegue a acuerdos. Escuche, no sólo a los que le doran la píldora, mire a su alrededor.
2. Gobierne para todos los ciudadanos. Ricos, pobres, votantes, no votantes, hombres, mujeres, heterosexuales, homosexuales, etc. No distinga a las personas por su condición religiosa, sexual, cultural.
3. Sea antes gestor ejemplar que político. Olvidese de ideologías políticas, derechas o izquierdas. Lo que estamos viviendo lo sufrimos todos.
4. Recorte lo que tenga que recortar, pero nunca en educación, sanidad, dependencia, igualdad, violencia de género, etc.. No nos quite los pocos pilares que nos quedan en nuestro estado de bienestar.
5. Reforme lo que tenga que reformar, pero  no pierda el norte. Hágalo bien y con sentido, no plegándose a los deseos de Alemania.
6. Evite los gastos superfluos, trajes de primeras marcas, coches oficiales, exceso de cargos públicos, asesores. Gestione adecuadamente a los empleados públicos, hágalos productivos, mejores y rentables.
7. Invierta en infraestructuras, nuevas teconologías, en I+D+i, educación, sanidad. No sólo hay que pagar la deuda soberana.
8. Entienda la diversidad de culturas que forman nuestra nación. Luche por la paz en Euskadi, mire hacia adelante. Progrese.
9. No nos obligue a trabajar hasta que salgamos del trabajo en una caja de pino.
10. Pague las facturas, de ello dependen muchas familias.
11. Cuidese de no sufrir el síndrome de la Moncloa. Salga a la calle, hable con los ciudadanos. No se encierre. 
12. Por favor, no se olvide de los 5 millones de parados que hay en este país.
13. Trabaje para que la democracia sea justa y plural.
14. Ha recibido de herencia una patata caliente, una herencia envenenada, de la que también le culpo a usted por haber mantenido una oposición durante ocho años basada en la crispación y una oposición destructiva y de mal gusto. No ha aportado nada positivo en todos estos años. Haga todo lo que esté en su mano para que la actividad parlamentaria se desarrolle en un ambiente correcto. Den todos ustedes ejemplo.
15. Tiene usted que decidir ahora su gobierno. No se rodee de nombres, rodeese de buenos gestores y expertos en la materia.
16. En definitiva, haga usted bien su trabajo porque todos saldremos ganando.

Y sin más me despido de usted no sin antes desearle suerte, que la va a necesitar.

Una ciudadana corriente.