Enésima novela sobre la guerra civil y la postguerra, donde los malos son malos malísimos y los buenos son buenos buenísimos...
No entiendo la narración de una episodio de nuestra historia donde se tome partido por un bando cuando en una guerra, da cual sea, todos pierden. Y nosotros perdimos...y mucho.
Pero más allá del contenido y la trama del libro, me ha parecido aburrido y con excesivos saltos temporales entre el pasado, el presente y el futuro...
En cualquier caso, creo que para escribir sobre la Guerra Civil Española hay que hacerlo desde un punto de observación objetivo e imparcial. Es la única manera de llegar a entender y valorar por uno mismo lo que acaeció en aquellos tiempos y es algo que me parece primordial que nuestras futuras generaciones conozcan.
1 comentario:
A quién se le ocurre leer a escritores dogmáticos! Hay que ser masoquista...
De todas formas es difícil que alguna vez se escriba la historia de la Guerra civil del treinta y seis sin que quede la duda de si estamos ante los hechos objetivos, sin desapasionamiento.
Te podría recomendar a Ian Gibson (amigo, por cierto de Rocío) pero me parece que se ha destapado y ha perdido la oportunidad de haber sido el Historiador de la Guerra Civil Española.
También a Hugh Thomas, o a Paul Preston.
Decididamente debes recurrir a algún historiador británico. Aunque también Ricardo de la Cierva, Santos Julià, también, sí, Juan Ramón Jiménez, que me parece muy cerca de la objetividad que reclamas, o porqué no, Pio Moa (cuestionado).
Pero vamos, no te apures, las generaciones futuras no necesitarán conocer porqué sus bisabuelos se enzarzaron entre ellos: nosotros pasaremos sin conocer la verdad y mal que bien vamos tirando aun a costa de que aparezcan nuestros fantasmas.
Pero bueno, si quieres acercarte a una crónica basada en hechos reales sobre algunos de aquellos terribles días de julio a noviembre del 36, en las trincheras de Madrid o en las vegas y riscos del Guadarrama, o sintiendo las heladas aguas del Jarama, o en la aséptica sala de un hospital de campaña, o junto a los muros del Alcázar de Toledo, o junto a un fusilado en un muro de Toledo, o entrando a la la madre de todas las criptas, si quieres,ya digo, mientras esperas una historia ciento por ciento real, yo te dejo mi Ambas orillas, que espero que algún día alguien leerá y dirá: Causa finita!
No te cortes y comenta la entrada. Tus comentarios serán bienvenidos.