Se acaba el año 2011, una año "horribilis", duro, extremadente complicado para muchas familias.
Me gustaría poder mirar atrás y comprobar que todo lo ocurrido durante este año ha sido moderadamente bueno e insignificantemente malo, pero los hechos contradicen mis "buenos deseos".
Quisiera ser positiva, estar ilusionada por el comienzo de un nuevo año. Pero llevan ya haciendo campaña durante mucho tiempo para que nos hagamos al cuerpo de lo duro que va a ser 2012, como para estar alegre y feliz de tirar un calendario sin hojas a la papelera. Y tanto pesimismo nada tiene que ver con las profecías mayas de final del mundo...aunque si nos paramos a pensar ¿esto que estamos viviendo no lo es?.
Soy consciente de que hay que tener esperanza, ser positivo, poner una sonsrisa a los malos tiempos, pero cuando todo lo que te rodea, cuanto todo lo que se dice es negativo, resulta complicado contagiarse de los buenos propósitos e intenciones para el nuevo año.
Aún así me obligo en muchos momentos a pensar que "todo pasa", que ya llegaran buenos momentos, que todo tiene solución, que mientras haya salud todo lo demás es secundario....
Esta noche brindaré por el nuevo año, comeré mis uvas, pasaré un buen rato con mis amigos de siempre, y mañana cuando me levante empezaré la lucha porque no queda otra, por mis hijos, mi familia y por mí.
Sólo espero que para tod@s, el año que comienza sea lo mejor posible, y que las cosas malas que traiga se superen lo antes posible, y que las cosas buenas las vivamos intensamente aprovechando cada segundo.
FELIZ AÑO 2012
1 comentario:
Cada año, que no dejan de ser una hojas más del calendario, es un afán distinto que hay que afrontar con esperanza. La vida es un ciclo pero de vivencias por estrenar. Afrontemos el futuro con optimismo sin pensar en profecías ni otras chaladuras. El 2012 será como tenga que ser y otra cosa es hacer conjeturas. Carpe diem.
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